Mil kilómetros al oeste de la costa ecuatoriana se encuentra este archipiélago de origen volcánico. Desde el mar, las islas parecen estar formadas por lava y ceniza. Los procesos volcánicos que formaron las islas aún están en pleno apogeo. Los volcanes de Isabela y Fernandina se cuentan entre los más activos del mundo e incluso hoy en día ocurren erupciones con regularidad.

Lo especial de las islas es que nunca han estado en contacto con el continente. Por tanto, los animales y las plantas han evolucionado de forma diferente a los del continente. La característica más llamativa es la inimaginable mansedumbre de los animales. Debido a la falta de depredadores y humanos, los animales que viven en la isla han perdido su timidez original.

Un viaje a las Galápagos es un asunto costoso. Sin embargo, cada año unos 140 000 turistas visitan Galápagos.

Nuestra sección «Galápagos» ofrece una amplia variedad de cruceros.